"Sargento Stubby", héroe de la Primera Guerra Mundial.


Durante su entrenamiento militar en los alrededores del campus de la Universidad de Yale, Connecticut, Estados Unidos, en julio de 1917, el cabo J. Robert Conroy encontró y se encariñó de un cachorro de Boston bull terrier que merodeaba por allí. Conroy bautizó aquel perro con el nombre de Stubby (1) y pronto se convirtió en la mascota del Regimiento 102 de Infantería, integrado en la 26ª División conocida como Yankee.
 

Stubby (2).

 
Stubby aprendió los toques de corneta, y también a saludar militarmente, lo que favoreció que se le permitiera acompañar a los soldados, una decisión contraria a la norma que no autorizaba a los soldados tener animales de compañía. Cuando la División embarcó rumbo a Francia en el transatlántico SS Minessota, Conroy subió a Stubby a bordo a escondidas, ocultándolo en el depósito de carbón del buque. Ya en alta mar el perro fue sacado a cubierta donde pronto se ganó el aprecio de la tropa. Se cuenta que fue su saludo militar el que le valió a Stubby que el oficial le permitiera seguir acompañando a los soldados. Ya en Francia recibió una autorización especial para acompañar a su Regimiento al frente de combate, en Chemin des Dames, al norte de Soissons, donde llegó el 5 de febrero de 1918. Stubby se acostumbró pronto al ambiente bélico de ruido, disparos y artillería pesada.

Conroy y Stubby en marzo de 1919 (2).
Su primera herida de guerra fue una intoxicación por gas mostaza. Tras recuperarse en el hospital de campaña Stubby volvió al frente. Se había vuelto sensible al más mínimo rastro del gas y en varias ocasiones recorrió la trinchera mordisqueando y despertando a sus soñolientos compañeros para advertirles de la presencia del veneno, acción que salvó numerosas vidas. Destacó asimismo localizando heridos y acompañando a los paramédicos, y también guiando a los soldados perdidos de vuelta a sus trincheras. Se cuenta que en una ocasión localizó a un soldado espía alemán que estaba mapeando las trincheras aliadas, y que durante su persecución le mordió en las piernas, consiguiendo que tropezara y cayera, acosándolo hasta que llegaron los soldados estadounidenses. Por aquella captura Stubby fue ascendido por méritos de combate a sargento por el comandante del Regimiento, el primer perro en conseguirlo en su país.

Su segunda herida de guerra la sufrió en abril de 1918 durante el asalto a Schieprey y fue causada por la metralla que recibió en el pecho y en una pata durante un ataque con granadas. Pasó primero por el hospital de campaña y después por un hospital de recuperación de la Cruz Roja. Cuando pudo caminar, antes de regresar a la vanguardia, visitó a los soldados heridos para levantarles la moral. Tras la batalla y liberación de Château-Thierry en julio de 1918, las mujeres de la población le cosieron un abrigo de gamuza al que se le irían prendiendo sus medallas y honores.

 
El sargento Stubby, ya retirado, luciendo sus condecoraciones.

 
Al cabo de dieciocho meses en el frente y después de haber participado en diecisiete batallas, tras el armisticio desfiló por la calles de París y se reunió el día de Navidad en Mandres-en-Basigny con el presidente Woodrow Wilson. Ya de vuelta a casa Stubby, que encabezó numerosas paradas militares, fue desmovilizado en Camp Devens, Massachusetts, el 20 de abril de 2019. Más tarde sería recibido por los presidentes Warren G. Harding y Calvin Coolidge. También en 1921 por el comandante general de los ejércitos de los Estados Unidos el general John Pershing, que le impuso la medalla de oro de la Sociedad Humana de los Estados Unidos. Sus hazañas habían ocupado la primera página de los periódicos. Stubby recibió gran número de honores y condecoraciones. Cuando J. Robert Conroy comenzó a estudiar derecho en la Universidad de Georgetown, Stubby se convirtió en la mascota de los equipos deportivos universitarios. Durante los descansos del equipo de rugby jugueteaba por el campo con el balón.

 
Stubby y Conroy con el general John Pershing en 1921 (2).

 
Stubby falleció el 16 de marzo de 1926 mientras dormía. Su obituario ocupó más de media página del The New York Times del 4 de abril. Conroy lo mandó disecar y tres décadas después, en 1956 lo donó al Smithsonian de Washington, donde permanece en la exposición Price of Freedom: Americans at War del Museo de Historia de Estados Unidos, junto a la paloma Cher Ami, otro héroe de la Primera Guerra. Tras su fallecimiento Stubby fue pintado por el artista oficial del Capitolio Charles Ayer Whipple. En 2006, durante la celebración del Día del Armisticio, se colocó una placa en su honor en el Paseo del Honor del Liberty Memorial de Kansas City. La historia de Stubby ha protagonizado varios libros y la película de dibujos animados Stubby, un héroe muy especial (Sgt. Stubby: An American Hero, 2018).
 
 
Vista posterior de Stubby (2).

 

Notas y créditos.-
(1) Cuya traducción aproximada al español sería Rechoncho.
(2) Fotografías e imágenes propiedad del Museo Smithsonian de Washington.
 
 
© All rights reserved. ® Reservados todos los derechos.
Taxidermidades, 2022.
 
 
Bibliografía:
--- Stubby of A.E.F. Enters Valhalla , en The New York Times, Nueva York, 4 de abril de 1926.
 
Recursos: 
Artículos sobre Perros y Taxidermia en Taxidermidades.