La Crosby Frisian Fur Company de Rochester.


Tarjeta postal de Crosby Frisian Fur Co. de 1911.


En el anverso leemos: "Déjenos curtir su piel. El mayor y mejor edificio equipado dedicado íntegramente al curtido de pieles por encargo, taxidermia y montaje de cabezas en este o cualquier otro país". Y en el reverso: "Fue un buen y viejo cuáquero quien dijo: 'Si hay algo bueno que pueda hacer por tí, déjame hacerlo ahora, porque no volveré a pasar por aquí.' Esta tarjeta va dirigida a tí, confiando en que puedas precisar piel de vaca o caballo, de ternera u otras pieles para confeccionar abrigos, capas, alfombras u otros artículos. (...)". El texto proseguía instando al receptor de la tarjeta a que probase a encargarles el curtido de una piel. 
 
Esta postal con matasellos de 1911, cuyo receptor se encontraba en la población de Orange, Massachusetts, nos muestra la The Crosby Frisian Fur Company, una curtiduría industrial de Rochester, Nueva York, Estados Unidos, que disponía de una seción de Taxidermia, en sus años de esplendor. Su actividad se prolongó entre finales del siglo XIX y mediados el siglo XX. 
 

"Home Taxidermy for Pleasure and Profit" de Albert B. Farnham.


Albert B. Farnham.
La primera noticia que tengo de Albert Burton Farnham (1870-?), taxidermista de Benning, Washington D.C., Estados Unidos, la hallo en el Informe Anual del Museo Smithsonian de Washington del año 1890, donde aparece en el apartado Estudiantes como "asistente voluntario en el departamento de taxidermia". Aficionado a la caza y a la ornitología, en mayo de 1894 la revista The Oölogist publicó una reseña suya en la que describía cómo construir una barca de forma económica. Al año siguiente Farnham mandó una carta a la revista Natural Science News quejándose del escaso rigor de algunas publicaciones divulgativas de Historia Natural. Años más tarde, en abril de 1899 la revista Recreation publicó otra contribución en la que describía cómo para evitar la posible pérdida de especímenes antes de llevarlos al taxidermista, una vez eviscerado el animal, éste se podía sumergir en una mezcla de una parte de formol con de 9 a 14 partes de agua. Ello era válido, aseguraba, para ejemplares de hasta el tamaño de un zorro, y el método funcionaba, afirmaba, igualmente en aves y reptiles que en mamíferos, y añadía que "al retirarlos de la solución, se pueden desollar y montar tan fácilmente como los especímenes frescos". Farnham colaboró en la revista Modern Taxidermist; por ejemplo en octubre de 1941 escribió sobre las afectaciones de la Primera y Segunda Guerras Mundiales en la Taxidermia.
 

"Fast Charlie", película de acción con taxidermista.


La actriz Morena Baccarin como taxidermista en Fast Charlie (1).


La película de acción y suspense Fast Charlie (2023, 90'), dirigida por Phillip Noyce, con guion de Lee Goldberg y Richard Wenk, está basada en la novela La jaula de los monos (Gun Monkeys, 2003) de Victor Gischler. Su sinopsis oficial es la siguiente.
 
Charlie Swift (Pierce Brosnan) es un eficiente y discreto sicario que lleva veinte años trabajando a las órdenes de Stan Mullen (James Caan), jefe de la mafia de Orlando. Después de tanto tiempo, son como padre e hijo. Todo va bien hasta que Charlie descubre que uno de sus socios ha traicionado a Stan antes de cambiar de organización criminal. Eso hará que Charlie se vea implicado en una guerra de venganza y asesinatos en la que Marcie Kramer (Morena Baccarin), la ex esposa de su última víctima, taxidermista aficionada, es la única persona en la que puede confiar.
 

"Das Ausstopfen der Tiere" de Hermann Wohlbold.


Das Ausstopfen der Tiere, edición de 1921.
Publicado por vez primera en 1916, el manual Das Ausstopfen der Tiere, en español El disecado de animales, obra de Hermann Wohlbold, ocupa 61 páginas y tan sólo contiene tres ilustraciones, las que acompañan el texto de este artículo. Fue editado en Leipzig por Hachmeister & Thal, que lo incluyó en la serie Lehrmeister Bücherei, la Biblioteca del Profesor, una serie con centenares de libritos instructivos de temas variados. El tratado se reimprimiría en 1921 -la edición de que dispongo- y en 1931. Desconozco datos del autor.
 
La introducción advierte de que la publicación sólo "puede considerarse, por supuesto, como una primera guía para aquellos que deseen trabajar en este campo. Puede mostrarle cuál es la razón, consejos a seguir. Lo que no puede ofrecerle es la habilidad para ejecutarlo, que sólo puede adquirirse mediante práctica prolongada. El principiante a menudo fracasará, sus dedos no obrarán con suficiente habilidad y su ojo deberá encontrar su correcto punto". Y prosigue con consejos comunes en este tipo de tratados: prestar atención a los detalles, observar los animales en la naturaleza, trabajar sin prisa, etc.
 

El ave del paraíso "disecada" pintada por Rubens en 1609.


Detalle del ave del paraíso del tocado del rey Baltasar de la Adoración de Rubens (1).


En al menos una decena de óleos del Museo Nacional del Prado de Madrid vemos representados ejemplares de aves del paraíso: en dos paraísos de Jan Brueghel el Joven, en otro de Pieter Brueghel el Joven, en una obra de Denis van Alsloot y Hendrick de Clerck, en otra de Jan Brueghel el Viejo y Hendrick van Balen, en Las cuatro partes del Mundo de Jan van Kessel el Viejo, en el Concierto de aves de Frans Snyders, en Las ciencias y las artes de Adriaen van Stalbent, en El Aire de Martin de Vos, en otro El Aire anónimo, en Eolo atribuido a un seguidor de Pedro Pablo Rubens, y en La adoración de los Reyes Magos (1609) del propio Rubens, además de en algunas aguatintas y litografías. Un elemento común es que se tratan de obras de los siglos XVI y XVII. La mayoría se las aves del paraíso se representan volando, algunas muertas preparadas "en piel", como es el caso en  La Adoración de Rubens decorando el tocado del rey Baltasar.